REVISTA YNDICIO 1

estudian variables de la familia o con- textos relacionados con algún parámetro escolar. 3) Tecnológicas: vinculan los aspectos familiares con el microentorno munitario de la escuela. La Investigación Científica en Educación En el primer grupo predominan los mo- delos conductuales, en el segundo se suman objetivos dirigidos al impacto de la funcionalidad de la familia en el pro- ceso escolar y en el tercero se evalúa la tecnología educativa actual para mejorar la educación. Son más numerosos los es- tudios cualitativos en campo, que no de- tallan las características para la obten- ción de los datos, ni justifican de manera sólida el procedimiento. Parece haber más interés en el relato narrado de las entrevistas que tratan de desarrollar un cuerpo integrado de categorías axiológi- cas el cual representa la diversidad de visiones y la pluralidad de posiciones. Se puede deducir que no existen mode- los teóricos o metodológicos que sirvan para integrar y cuestionar los datos que se van derivando de los estudios. Pare- ce existir poco interés en relación con la problemática educativa asociada a la familia, pues en general los estudios hacen contacto con la educación, el de- sarrollo humano, las políticas públicas o la búsqueda de nuevas alternativas para promover el aprendizaje. Los investigadores, en su mayoría psicó- logos, llegaron al tema de manera indi- recta a través de programas de evalua- ción, desarrollo humano o estimulación de reper torios psicológicos. estudian variables de la familia o con- textos relacionados con algún parámetro escolar. 3) Tecnológicas: vinculan los aspectos familiares con el microentorno munitario de la escuela. La Investigación Científica en Educación En el primer grupo predominan los mode- los conductuales, en el segundo se su- man objetivos dirigidos al impacto de la funcionalidad de la familia en el proceso escolar y en el tercero se evalúa la tec- nología educativa actual para mejorar la educación. Son más numerosos los estu- dios cualitativos en campo, que no deta- llan las características para la obtención de los datos, ni justifican de manera sólida el procedimiento. Parece haber más interés en el relato narrado de las entrevistas que tratan de desarrollar un cuerpo integrado de categorías axiológi- cas el cual representa la diversidad de visiones y la pluralidad de posiciones. Se puede deducir que no existen mode- los teóricos o metodológicos que sirvan para integrar y cuestionar los datos que se van derivando de los estudios. Pare- ce existir poco interés en relación con la problemática educativa asociada a la familia, pues en general los estudios hacen contacto con la educación, el de- sarrollo humano, las políticas públicas o la búsqueda de nuevas alternativas para promover el aprendizaje. Los investigadores, en su mayoría psicó- logos, llegaron al tema de manera indi- recta a través de programas de evalua- ción, desarrollo humano o estimulación de reper torios psicológicos. 31 la endencia hacia la elev c ón en el número de investigado- r s y ci ntíf cos de nuestro país, a dife encia de los pr gra- mas de especialidad que requieren de una integración a pro- gramas de maestría para poder continuar sus estudios a nivel doctoral. Desde esta visión, re ulta necesario poder vincular a los espe ialistas a procesos integr d res que garantic n su continuidad hacia niveles superiores, sin qu ello signifique volver a empezar un programa de posgrado a nivel de maes- tría. Ah ra bien, onvi ne m ncionar que la década de los setenta marcó el inici de la expansión de l s studios de posgrado en México como r spuesta dos propósitos: PRIMERO. Form r profesionistas que fo talecier n a las ins- tituciones de educación superior específicamente e la do- cencia; p ra contribuir la formación de profesionist s que apoyar n el desa rollo científico y tec ológico que requería el país. SEGUNDO. La gen r ción de una cultura que apuntara hacia la especialización en determinados campos d l conocimiento ientífico (COMEPO, 2002). E ta expansión del posgrad e explica tambié por otros factor s ntre los destacan el incr mento d la pobla ión estudiantil a niv l licenciatura; lo que prov có l crecimient n tural de l pirámide escolar. A par tir de 1990 se iniciaron esfuerzos por refunci nalizar y adecuar a las universid des para que elevaran su calidad y efi ie cia en la formación de profesionales ltamente calificados; poniendo esp cial énfa- sis en el posgrado. Es necesario t mar en cuenta que, durante esta etapa de ex- pansión, no se i corporó al sis ema ningún tipo de innovación académica que permiti ra garantizar un nivel aceptable en el re dimiento educativo y est condujo a un aum nto en lo años de estudio con mayor exigencia de los requisitos reales para el desemp ño de pue tos de trabajo ante l crecient devaluación del mercado para absorber los recursos huma- nos.

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