Yndicio 2 paginas

importante no olvidar es que el conocimiento de la realidad no solo es enfrentarse a la realidad sin más, sino que es fundamental aclararnos cómo la observamos, cómo la interrogamos, e in- cluso cómo se construye el dato y la información. De aquí que los procesos de institucionalización necesitan tener claro su perspectiva epistemoló- gica y vincular a ella los hechos psicológicos del cambio, para ello necesitamos dialogar, entender para llegar a una realidad común. Pero, ¿cuáles podrían ser los contenidos de ese diálogo? Desde mi punto de vista, la realidad misma, social e institucional, partiendo de las diferencias de pensamiento de cada uno, como la mejor forma de buscar significados. LOS SUJETOS EN EL CAMBIO Sin duda, el cambio está vinculado al desarrollo humano el cual a su vez es dependiente de las formas de ver y observar, pero también de la disposición a estar cambiando, de renovarnos internamente. Comprender la realidad es en- tonces un proceso de aprendizaje. Éste es un hecho psicológico que permite unir lo abstracto con la experiencia vivida, con pensamiento no abstracto. Para lo que es necesario entender el significado de la cotidianidad en el mí mismo circunstancial, darnos cuenta que lo que parece obvio no es tan obvio. No obstante, si queremos un verdadero cambio es necesario reconocer que este requiere de un diálogo sincero. Tener en cuenta que el diálogo es una construcción cuyo significado nace de la relación con el otro, en la que es preciso evi- denciar quiénes somos, nuestras motivaciones, emociones, lo que hay en nuestra comprensión. Aislarse genera pérdidas del potencial humano de generar ideas, y del diálogo mismo. Las instituciones dependen de su gente, de buenos y significativos procesos, de tecnología de punta y de la calidad de liderazgo de sus jefes. Frente a los resultados está el 80% de los sujetos y el 20% de la organización institucional. Cada uno de nosotros decide qué clase de ser humano quiere ser, qué cualidades y virtudes de ser humano asume en esa toma de conciencia cuando se pregunta quién soy. Y en este proceso puede optar solo por el super ego o también acompañarla con la necesidad de ver, oír, compartir, poner atención, llegar a la sabidu- ría, dar de sí. No es fácil descubrir el significado de ser coherente, actuar desde una posición y cuestionarse, buscar lo desconocido, entender la propia imagen. El en- tendimiento empieza cuando la pregunta surge, pasa del reino de las respuestas simples y mecánicas a experi- mentar un proceso inteligente, crítico. El auto estudio es una actitud ante la vida, para lograr un mejoramiento permanente que acompaña y empodera. Las acciones dependen del significado que el sujeto le da al mundo, sus principios, sus cuali- dades, su filosofía de vida, de aquí el compro- miso, el desgano, el temor ante su condición económica. Dentro de este significado, no solo cuenta el saber sobre el mundo, sino también el saber el para qué hago lo que hago, ¿me proporciona felicidad? No hay duda que nuestra generosidad, compromiso, humildad, hones- tidad, compasión, tolerancia, nos garantiza el resultado perfecto: extender los límites del propio “yo”, con el fin de impulsar el desarrollo espiritual propio y el ajeno. Nada en la vida es casualidad, todo es causalidad donde el hoy es siempre permanente.